Gestión administrativa y control
Tipos de control
Al revisar lo que la gestión de la planeación ha producido, se ejerce la supervisión o control del administrador, proceso que permite reorientar y corregir los errores que se presenten y que se conoce como parte de los controles generales de una empresa.
Otros tipos de procesos de control se refieren a evaluar el desempeño dentro de la empresa, para lo cual se plantean herramientas de gestión como los presupuestos estándares o patrones de comportamiento, registros y gráficos que permiten observar la operación y las desviaciones referidas al plan establecido. Además, actualmente hay numerosos paquetes de software que se han desarrollado para el control de la gestión. Cuando una empresa se encuentra bien organizada, los controles permiten tener un orden en cualquier área para saber en qué situación se encuentra la empresa en cada uno de sus departamentos.
Control sobre las políticas
Las políticas son guías de acción para los miembros de la organización Su objetivo es uniformar criterios en las decisiones. Mediante este control es posible ir eliminado políticas ya obsoletas o cambiarlas por otras que sean mas reales.
Control sobre los procedimientos
Son guías de acción que detallan de una manera exacta cómo se debe realizar una cierta actividad. Generalmente los procedimientos se presentan en un manual, el cual constituye un excelente instrumento de control. Como generalmente los procedimientos especifican aspectos técnicos y, como las técnicas están progresando a una gran velocidad, parece lógico mantener un estrecho control sobre los procedimientos en uso, para ver el modo de aumentar su eficiencia.
Control sobre el personal
Es necesario mantener un control constante sobre la calidad de los individuos que operan dentro de la empresa (a todo nivel) y la motivación del personal. Un indicador que es útil, es el “sistema de quejas”, la frecuencia de éstas indudablemente es un indicador de peligro.
Control de la producción
El control de la producción se deriva de la necesidad de dirigir la producción y combinar los equipos y recursos existentes con el fin de obtener de ellos una alta productividad. Este control es muy importante en aquellas empresas que poseen varias “líneas o series de productos” (es decir, los artículos que la empresa ofrece en venta); y quizá no tan importante en aquellas empresas de proceso interno (es decir, aquellas que fabrican constantemente un producto determinado).