Los textos de divulgación

Los textos de divulgación generalmente son de carácter expositivo-explicativo (Ugarteburu, Alberdi y Garcia, 2012)¹, es decir, nos presentan la información a través una descripción del tema a tratar y con la finalidad de explicarlo y hacerlo comprensible para nosotros.

El objetivo primordial del texto de divulgación es justamente “explicar” el conocimiento al público en general, es decir, a personas que no son especialistas en el tema que se está abordando.

Para lograr su propósito de hacer accesible la información, los textos de divulgación, según lo planteado por Ugarteburu, Alberdi y Garcia (2012), presentarán una explicación didáctica en la que se utilizarán definiciones y se reformulará la información en mayor medida que en otros textos u otras situaciones comunicativas.

Según Cataldi² (2007), ello implica la recontextualización del conocimiento científico a través de tres procedimientos:

Reducción: consiste en la eliminación y condensación de información científica considerada irrelevante e innecesaria para los propósitos de difusión.
Expansión: implica incluir información que no está presente en el texto científico para facilitar la comprensión de los conceptos que se presentan en el texto.
Variación: incluye todos aquellos cambios que se efectúan para adaptar el texto al público en general, por ejemplo el tiempo verbal en el que se presenta el texto, las palabras o léxico que se utiliza.

1. Ugarteburu, I., Alberdi, X. y Garcia, J. (2012). La definición en textos orales de divulgación científica: forma lingüística y estrategias comunicativas. RESLA 25, 245-262

2. Cataldi, C. A. (2007). Divulgação Da Ciência Na Mídia Impressa: Um Enfoque Discursivo. En: M. C. Gomes, M. S. Melo, & C. Cataldi (Org.), Gênero Discursivo, Mídia E Identidade (155-164). Viçosa, Brasil: Editorial Universidad Federal Visçosa.

De acuerdo con Ugarteburu, Alberdi y Garcia (2012), las principales estrategias que se utilizan para lograr la reformulación del contenido de un texto científico y transformarlo en un texto de divulgación son tres:

* Definición y descripción: implica exponer y representar con claridad las características generales y específicas de algo (un concepto, un objeto), y se realiza con la finalidad de que el lector comparta el conjunto de conocimientos imprescindible para la comprensión del texto.

* Clasificación: son una serie de definiciones relacionadas entre sí, y consisten en categorías que, según lo planteado por Cabré y Estopa (2002), como se citan en Ugarteburu, Alberdi y García (2012) permiten dibujar el mapa conceptual y estructura de la información.

* Comparación y ejemplificación: facilitan la comprensión de la información e implica equiparar dos objetos, situaciones, o conceptos. Mientras que la ejemplificación consiste en ilustrar mediante un hecho, la información que se presenta. Este tipo de recursos se utilizan cuando a pesar de la reformulación se tienen dudas sobre la capacidad del texto para facilitar la comprensión de la información de interés.

Diagrama explicativo sobre los textos de divulgación.

Finalmente hay que recordar que la importancia de hacer divulgación de la ciencia a través de medios escritos es vital, pues este tipo de textos tienen amplia permanencia y distribución, además de que las personas tienen la tradición de adquirirlos y utilizarlos (Fierro, s.f.)³.

En el Índice de Revistas Mexicanas de Divulgación Científica y Tecnológica, es posible acceder a muchos ejemplos de texto de textos de divulgación científica.

3. Fierro (s.f.). La divulgación de la ciencia. Una visión personal. Recuperado de: DOCPLAYER

Autoevaluación

Instrucciones: Realiza la lectura del siguiente del artículo “Trabajadoras invisibles” escrito por Froylan M. E. Escalante que fue publicado en la “Deveras” Revista de Ciencia para Niños (da click aquí si quieres ir a la revista).

Pon atención a los colores del texto y más adelante indica qué tipo de estrategia está utilizando Froylan para hacer más accesible la información para los niños.

Trabajadoras invisibles

Froylan M. E. Escalante

froymario@edu.uag.mx

Ayer cuando terminé mi tarea me quedé pensando en lo que pasaría si nadie cuidara el planeta donde vivimos. Preservar la Tierra no es nada fácil, lo bueno es que no estamos solos en esta labor, ya que hay millones y millones de seres pequeños que nos ayudan todos los días a cuidarlo.

¡Averigua de quienes se trata!

Están por todo el mar, desde la superficie hasta las profundidades, ellas son las bacterias de los mares: Alcanivorax, su principal función en el cuidado del medio ambiente es limpiar las zonas donde hay derrames de petróleo.

Las bacterias de la familia Enterobacter y Providencia, viven en lugares sucios como los lodos y heces fecales, pero son capaces de remover materiales pesados del suelo como el cobre y el cadmio. Estos metales pueden resultar tóxicos para los seres vivos, sobre todo para las plantas y algunos animales silvestres. Generalmente, estos metales, provienen del drenaje y de las industrias que hay por todo el mundo. Las bacterias de estas familias hacen un maravilloso trabajo pues ayudan a descontaminar el suelo y las aguas.

¿Has oído hablar del insecticida llamado DDT?. Este insecticida era muy efectivo, pero también muy dañino para el medio ambiente, ya que es muy difícil de remover de los campos agrícolas donde se utilizaba. Por años causó problemas en la salud de la población que consumía los alimentos cultivados en esos campos, pero afortunadamente ya no se usa más. ¿Sabes cómo removieron el DDT de esos campos? Con un hongo llamado Phanerochaete. ¡Increíble!

Los pequeños cuidadores del ambiente no solo se encargan del agua y del suelo, también ayudan a remover contaminantes del aire. Por ejemplo, la familia Desulfotomaculum, tiene bacterias que transforman el azufre tóxico del aire en alimento para los microorganismos y de esta manera remueven los contaminantes para hacer más limpio el aire que respiramos.

Como estas hay muchas otras familias invisibles que trabajan sin descanso para ayudarnos a tener un mejor planeta y cuidar nuestra salud.