Psicoterapia

La psicoterapia no utiliza fármacos ni alguna forma de tratamiento orgánico, en cambio, intenta incorporar ajustes en el comportamiento, pensamientos y emociones del sujeto, mediante una variedad de estrategias, que permitan al propio sujeto tomar el control sobre sus acciones de vida cotidiana.

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Psicoterapia

Psicoterapia

Piscoterapia se refiere a una interacción emocional y confidencial entre el paciente que reporta alguna dificultad psicológica, y un psicoterapeuta. Existe una gran cantidad de modelos terapéuticos: el psicoanálisis, el conductismo, la teoría cognitiva, la teoría humanista, entre otros.

Sin embargo, la búsqueda a la solución de los problemas mentales se inició dentro de la práctica médica con la fundación de la psiquiatría, fueron los psiquiatras quienes acuñaron el término psicopatología. El modelo médico de la psicopatología sostiene que, dado que las enfermedades tienen un origen físico que puede ser diagnosticado, tratado y (en muchas ocasiones) curado, los desórdenes psicológicos deben ser similares. El modelo médico asume que los trastornos mentales pueden ser diagnosticados basándose en los síntomas del paciente y ser curados por medio de terapia orgánica.

La terapia biomédica

Trata los desórdenes psicológicos alterando la forma en que funciona el cerebro del paciente. Esto puede ser hecho mediante el uso de fármacos, los cuales alteran la transmisión electroquímica de las neuronas del cerebro.

Las drogas antipsicóticas tienen una estructura molecular similar a la neurotransmisora dopamina, de tal forma que bloquean los receptores neuronales impidiendo su activación. Los antipsicóticos ayudan a los pacientes esquizofrénicos a mantener su atención fuera de los estímulos irrelevantes (internos y externos) y disminuyendo la ocurrencia de alucinaciones.

Las drogas ansiolíticas reducen la actividad del sistema nervioso central, creando una sensación de calma emocional. Los antidepresivos incrementan la actividad de los neurotransmisores noradrenalina y serotonina, los cuales incrementan los niveles de atención y el ánimo.

Aunque los psicofármacos son sumamente eficientes para aliviar los síntomas de diversos trastornos mentales, estos frecuentemente producen efectos secundarios indeseables y muchas veces se aplican sin tomar en cuenta los eventos socio afectivos que originaron y mantienen el trastorno, por lo que son más efectivos cuando se usan paralelamente con algún tipo de psicoterapia.

La psicoterapia no utiliza fármacos ni ninguna forma de tratamiento orgánico, en cambio, intenta incorporar ajustes en el comportamiento, pensamientos y emociones del sujeto, mediante una variedad de estrategias, que permitan al propio sujeto tomar el control sobre sus acciones de vida cotidiana. Existe una gran diversidad de técnicas psicoterapéuticas, mencionaremos a continuación algunas de las utilizadas.

Terapia psicoanalítica

Como búsqueda terapéutica, Freud comenzó el tratamiento de sus pacientes histéricos utilizando la hipnosis, sin embargo, al no convencerse del todo de su eficiencia estructuró una nueva técnica a la que llamó de asociación libre, en la que el paciente va expresando cualquier cosa que viene a la mente. Analista y paciente intentan encontrar las raíces inconscientes de los pensamientos y conductas que causan las molestias y angustias en el paciente. Inevitablemente, el fluir de las asociaciones libres se ve frecuentemente entorpecido por la sensación de que la mente está en blanco, o por que las ideas pueden ser vergonzantes, inaceptables, inapropiadas, irrelevantes, etc.

Cualquier autocensura que el paciente hace en sus asociaciones libres, se considera como una resistencia, la cual es un material que produce ansiedad en la conciencia del sujeto. El significado de la resistencia (la forma en que el paciente se defiende para no dejar emerger la materia que le produce ansiedad) es interpretado por el analista y señalado al paciente.

El analista puede utilizar frases como: “parece que se siente avergonzado cuando habla acerca de sus relaciones sexuales”, con el fin de alertar al paciente sobre sus resistencias y con el fin de descubrir deseos, miedos o conflictos encubiertos, que han sido reprimidos. La meta última del psicoanálisis es ayudar al paciente a que penetre en el conocimiento de sus conflictos y controle su efecto, incrementando su entendimiento y autoconciencia.

La terapia humanista.

Al igual que el psicoanálisis esta teoría enfatiza la necesidad de que el paciente incremente su autoconciencia, como condición para el cambio. Sin embargo, en contraste con el psicoanálisis la terapia humanista se concentra en hacer consientes los sentimientos y pensamientos exclusivamente del presente. La técnica utilizada por la terapia humanista se denomina terapia centrada en el cliente.

En esta forma de tratamiento, el terapeuta funge como un escuchador activo; sincero, tolerante y empático, de todo aquello que el paciente quiera decir, sin hacer interrupciones ni interpretaciones.

El terapeuta refleja (repite) lo que el paciente está diciendo con la finalidad de mostrarle que lo está escuchando atentamente. La finalidad es proveer al cliente de un ambiente seguro donde se haga prosperar una tendencia natural hacia la salud personal.

La terapia conductual

A partir de la perspectiva del aprendizaje, utiliza los principios del condicionamiento clásico y condicionamiento operante para incrementar conductas deseadas o eliminar conductas indeseables. Los conductistas no creen que el buscar los determinantes inconscientes o ser más autoconsciente sea la clave para cambiar la conducta. Los conductistas se concentran en la modificación de la conducta a través del uso del condicionamiento y el contra-condicionamiento.

Dos técnicas terapéuticas de contra-condicionamiento son: la desensibilización sistemática y el condicionamiento aversivo. La desensibilización sistemática es frecuentemente usada en el tratamiento de los temores irracionales (fobias), consiste en asociar un estado de relajación con la situación que provoca ansiedad.

La idea es que no se puede estar ansioso y relajado al mismo tiempo. Si una persona utiliza una técnica de relajación (respiración profunda, relajamiento muscular, elaboración de imágenes tranquilizadoras) mientras está ante la presencia del estímulo que le produce ansiedad, la ansiedad será eliminada.

El condicionamiento aversivo es un proceso en el que se asocia una situación desagradable con una conducta indeseable. Esto significa que cada vez que se hace algo que se supone que no se debe hacer, algo realmente desagradable sucederá. Un ejemplo podría ser cuando en un alcohólico se producen nauseas cada vez que bebe alcohol.

La economía de fichas es un programa de condicionamiento operante que incluye el reforzamiento de las conductas deseadas y el cobro de reforzamientos previamente ganados, por emitir conductas no deseadas. Los sujetos obtienen fichas cuando emiten conductas deseadas o no emiten conductas no deseadas.

Posteriormente las fichas pueden ser canjeadas por privilegios o regalos. Este tipo de modificación conductual funciona muy bien con niños o adultos en situación de confinación (enfermos mentales, reclusos, clínicas de desintoxicación). Sin embargo, los cambios a largo plazo, son raros, ya que, tan pronto como el sistema de reforzamiento es retirado, el comportamiento no deseado reaparece.

Terapia conductual-cognoscitiva

Combina técnica conductuales de moldeamiento y modelamiento, con estrategias para controlar el curso de los pensamientos que precede al comportamiento inadecuado. Por ejemplo, si una persona es depresiva el terapeuta intentará cambiar los patrones de pensamiento del paciente, de la auto-derrota a la auto-ayuda.

En la terapia conductual-cognoscitiva, se trata de que el paciente tome conciencia de sus pensamientos negativos e irracionales, remplazándolos con una nueva forma de pensar y hablar.

El paciente debe practicar esta nueva forma de pensar y hablar en todas las situaciones cotidianas. Si el paciente afirma cosas como: “si fallo en este examen nunca podré entrar a la universidad, todo mundo me va a despreciar, y seré un fracasado” el terapeuta puede enseñar al paciente a reestructurar su pensamiento y hacer afirmaciones más positivas, como: “este es un examen difícil, pero estudié duro para resolverlo y lo voy a hacer lo mejor posible; el que yo llegue a la universidad no depende de una sola calificación”.

Otra técnica cognoscitiva es la terapia racional-emotiva, en la cual el terapeuta anima y reta vigorosamente al paciente para que se confronte con sus pensamientos ilógicos, sus actitudes derrotistas y sus falsas suposiciones.

Terapias de grupo

Es una visión ecléctica y socializada que utiliza, en pequeños grupos, combinaciones de las técnicas antes señaladas (con excepción de la psicoanalítica). La formación de grupos le permite a cada paciente aprender de los demás en un ambiente de apoyo social. Frecuentemente, la condición de un paciente puede mejorar notablemente a partir del conocimiento de las experiencias de otros que padecen un problema similar, ejemplo de esto lo tenemos en los grupos de apoyo de Alcohólicos Anónimos, de violencia intrafamiliar, de neuróticos y muchos otros.

Terapia familiar

Concibe a la familia como un sistema en el cual cada miembro propicia las conductas deseables y no deseables de los otros miembros. La meta de la terapia familiar es incrementar los niveles de comunicación afectiva entre los miembros de la familia.

¿Te ha quedado claro en qué consiste cada tipo de terapia?

Autoevaluación

Realicemos una actividad para evaluar lo aprendido. Coloca dentro de las definiciones la terapia que corresponda.

Terapia

Terapia racional-emotiva
Terapia familiar
La desensibilización sistemática
El condicionamiento aversivo
Terapia psicoanalítica
La terapia humanista
La terapia conductual
La economía de fichas
Terapia conductual-cognoscitiva
Terapias de grupo

Definición

Tratamiento basado en la hipnosis y las fuerzas inconscientes.
Los conductistas se concentran en la modificación de la conducta a través del uso del condicionamiento y el contra-condicionamiento.
Se concentra en hacer consientes los sentimientos y pensamientos exclusivamente del presente.
Es frecuentemente usada en el tratamiento de los temores irracionales (fobias), consiste en asociar un estado de relajación con la situación que provoca ansiedad. La idea es que no se puede estar ansioso y relajado al mismo tiempo.
Es un programa de condicionamiento operante que incluye el reforzamiento de las conductas deseadas y el cobro de reforzamientos previamente ganados, por emitir conductas no deseadas.
Es un proceso en el que se asocia una situación desagradable con una conducta indeseable. Esto significa que cada vez que se hace algo que se supone que no se debe hacer, algo realmente desagradable sucederá.
En la cual el terapeuta anima y reta vigorosamente al paciente para que se confronte con sus pensamientos ilógicos, sus actitudes derrotistas y sus falsas suposiciones.
Combina técnica conductuales de moldeamiento y modelamiento, con estrategias para controlar el curso de los pensamientos que precede al comportamiento inadecuado.
Programa que concibe a la familia como un sistema en el cual cada miembro propicia las conductas deseables y no deseables de los otros miembros.
Es una visión ecléctica y socializada que utiliza, en pequeños grupos, combinaciones de las técnicas antes señaladas (con excepción de la psicoanalítica). La formación de grupos le permite a cada paciente aprender de los demás en un ambiente de apoyo social.